Electricidad durante las 24 horas de día, excursiones (en privado), comidas, bebidas, tragos, traslados y por supuesto, el alojamiento.
Cada habitación, además del comedor, tiene una estufa que trabaja con pellets (madera reciclada). Las estufas vienen desde Europa, tienen un termostato para regular la temperatura y se mantienen prendidas toda la noche, teniendo en cuenta el clima del salar.
El restaurante está a cargo de un conocido Chef de Bolivia y se sirven platos nacionales, internacionales, vegetarianos y/o veganos.